El pellet
Una energía limpia, sostenible y renovable
Los pélets o pellets de madera son un biocombustible generado a partir de partículas de madera, con forma de gránulos cilíndricos de 15-30 mm de longitud que se fabrican a base de serrín prensado y aglomerado por las propias sustancias de la madera sin necesidad de colas.
La fabricación de nuestros pellets, se lleva a cabo con rigurosos procesos de fabricación que respetan el medio ambiente; utilizando como materia prima restos forestales lo que lo convierten en una energía renovable y sin añadir ningún tipo de aditivo durante el proceso. Por eso, la ceniza que producen es totalmente biodegradable y puede ser usada como abono.
- No se cortan árboles 'ex profeso', puesto que se usan subproductos de las actividades silvícolas o de la transformación de la madera.
- Comodidad. En las estufas y calderas de pellets es el propio equipo el que alimenta el quemador según la demanda de energía.
- Reducción de emisiones y partículas frente a otras biomasas.
- Mayor poder calorífico que otros biocombustibles sólidos.
- Se reduce el tamaño de los equipos y almacenamientos.
- Simplifica la logística con sacos manejables o camiones cisterna.
- Generan menos cenizas que otros biocombustibles, pudiendo ser reutilizada como abono.
- Suele ser más barato que otros combustibles.
- Su uso, está indicado para consumo doméstico e industrial, y se distribuye en diferentes formatos según las necesidades de cada usuario.
La bioenergía, o aprovechamiento energético de la biomasa en nuestro caso el pellet, es una fuente de energía renovable basada en la materia orgánica vegetal y de sus productos asociados. Además de su contribución al medio ambiente, es la alternativa actual a los combustibles fósiles, y no solamente por su origen natural, si no también por su alto poder calorífico y su precio respecto al gasoil, luz o gas, por lo que supone un importante ahorro económico para cubir las necesidades termicas del hogar.
2 kg. de pellet equivalen a 8.000 kcal, o a 10 kWh, o a 1m3 de gas natural o a 1 litro de gasoil
Uno de los pilares sobre el que se asienta un sistema de economía circular es el de los bioproductos. Con el fin de encontrar alternativas a los productos derivados del petróleo y demás formas de energía tradicionales, esta opción se configura como una de las más sostenibles.
La biomasa, el pellet de forma especial por su proceso y valor añadido, es una materia orgánica que tiene un origen vegetal, la biomasa ha servido como recurso energético desde hace siglos, cuyo declive vino determinado por la normalización de la energía fósil. Hasta hoy, en que el encarecimiento del petróleo y el cambio climático han animado a reunir fuerzas en búsqueda de una fuente de energía limpia y renovable.
En materia energética la biomasa, pero muy particularmente el pellet es sinónimo de Economía Circular. Es tiempo de desterrar el actual modelo de producción y gestión de recursos, bienes y servicios basado en consumo de combustibles fósiles y enfocado a un consumo a corto plazo que está llevando al planeta a una situación insostenible.
En la naturaleza nada termina en un ‘vertedero’ sino que todos los elementos vuelven a ser aprovechados de una manera continua y son reutilizados para su aprovechamiento en distintas etapas. La economía circular busca no dar la espalda a la naturaleza y procura un acople con su ciclo.
En un torbellino de fabricación descontrolada de combustibles “sucios”, la economía circular pone el foco en prácticas habituales en tiempos pasados y que han quedado relegadas, que permite encontrar una segunda vida a los productos. Este concepto conecta directamente con la necesidad de refrabricar… y es que el proceso del pellet se acerca más a una refabricación y reutilización que a una primera factura.
La compra verde de combustibles sostenibles y el esfuerzo de los fabricantes, así ocurre con los asociados de Apropellets, por garantizar la sostenibilidad de sus procesos hará todo lo demás.